Este MIERCOLES 26/11 A LAS 9.30HS. se llevará a cabo el juicio a Fernando Grenno, estudiante de Ciencia Política de la UBA, militante de la corriente Universitaria Plan B quien se encuentra procesado por realizar una pintada con la consigna "APARICION CON VIDA DE JULIO LOPEZ", el día 1 de Mayo de 2007.
Convocamos a todas y todos a concentrarse este miércoles en Lavalle 1171 (Tribunal Nacional en lo criminal Nº 18), así como también a completar la carta adjunta, que tiene como objetivo ejercer presión sobre la justicia, manifestando el repudio de un mayoritario y legítimo sector hacia el procesamiento de Fernando Grenno.
El mismo 26 se dictará la sentencia, pudiendo el compañero ser sentenciado con una pena de hasta 4 años de cárcel, insistimos, por reclamar la aparición con vida de Julio López.
A su vez, les recordamos que la Presidenta del Tribunal, la Dra. Cristina Camiña, cuenta con una nefasta trayectoria al servicio de la impunidad.
Por citar sólo un ejemplo, fue quien en 1992 firmó el sobreseimiento del comisario Miguel Angel Espósito, implicado en la detención, tortura y asesinato de Walter Bulacio; también se trata de quien recientemente absolvió al policía Justo José Luquet, responsable de un reciente caso de Gatillo Fácil.
ABSOLUCION DE FERNANDO GRENNO
APARICIÓN CON VIDA DE JULIO LOPEZ
Repudiamos las amenazas al Dr. Andrés Carrasco
Desde La Formula repudiamos las amenazas al Dr. en Medicina Andrés Carrasco, profesor de embriología, investigador principal del Conicet y director del Laboratorio de Embriología Molecular con sede en el Instituto de Biología Celular y Neurociencias de la Facultad de Medicina, UBA.
Por otro lado, creemos que es un ejemplo de aplicación de la Ciencia y la investigación en función de las necesidades y problemáticas de nuestro Pueblo.
Respaldamos y apoyamos al Dr. Andrés Carrasco.
El doctor en medicina Carrasco, de 63 años, trabaja desde hace casi treinta en desarrollo embrionario, fue presidente del Conicet y es Subsecretario De Innovación Científica y Tecnológica del Ministerio de Defensa.
Realizó el experimento en su laboratorio de embriología molecular, con sede en el Instituto de Biología Celular y Neurociencias de la Facultad de Medicina, en la Universidad Nacional de Buenos Aires.
La difusión de su estudio dio lugar a virulentas reacciones del lobby agromediático.
Comenzó con una nota en Clarín de Matías Longoni, uno de los principales colaboradores del ex director del INTA y lobbysta sojero Héctor Huergo en el suplemento Clarín Rural, quien lo descalificó como “un supuesto estudio científico”.
Siguió con una nota en La Nación, sobre un “estudio de supuesta validez científica”.
Clarín está asociado con La Nación en la feria anual Expoagro, en torno de la cual se realizan cada año negocios por no menos de 300 millones de dólares vinculados con los productos transgénicos y sus encadenamientos económicos.
A mediados de esta semana Carrasco fue víctima de un acto intimidatorio en la propia Facultad de Medicina, donde cuatro hombres llegaron hasta su laboratorio e increparon a una colaboradora de Carrasco.
Dos de ellos, que parecían “muy nerviosos y exaltados”, se presentaron como miembros de la Cámara de la Industria de Fertilizantes y Agroquímicos y se negaron a dar sus nombres. Los otros dos dijeron ser abogado y escribano.
En ausencia de Carrasco interrogaron a la investigadora y exigieron ver “los informes, los experimentos”, para lo que carecían de cualquier título. Dejaron una tarjeta del estudio Basílico, Santurio & Andrada a nombre del abogado Alejandro Felipe Noël.
El decano de la Facultad de Medicina se solidarizó con Carrasco y le ofreció el asesoramiento del área jurídica de la facultad.
Cuando desde la facultad llamaron al estudio para verificar la existencia del abogado recibieron la respuesta de que no estaba.
Carrasco no oculta su indignación por la presencia amenazante de estas personas, que “no tienen derecho a hacer interrogatorios en un ámbito académico. Trataron de convertir en delito la difusión de mi trabajo, con una virulencia y agresividad enormes”.
Por la noche encontró en el contestador de su teléfono insultos a “este señor que no quiere mostrar el informe”.
El agrotóxico básico de la industria sojera produce malformaciones neuronales, intestinales y cardíacas, aun en dosis muy inferiores a las utilizadas en agricultura.
A trece años de fiebre sojera, por primera vez una investigación científica de laboratorio confirma que el glifosato (químico fundamental de la industria sojera) es altamente tóxico y provoca efectos devastadores en embriones.
El herbicida más utilizado a base de glifosato se comercializa bajo el nombre de Roundup, de la compañía Monsanto, líder mundial de los agronegocios.
“Los embriones fueron incubados por inmersión en diluciones con un mililitro de herbicida en 5000 de solución de cultivo embrionario, que representan cantidades de glifosato entre 50 y 1540 veces inferiores a las usadas en los campos con soja.
Se produjo disminución de tamaño embrionario, serias alteraciones cefálicas con reducción de ojos y oído, alteraciones en la diferenciación neuronal temprana con pérdida de células neuronales primarias”,
“Disminución del largo del embrión, alteraciones que sugieren defectos en la formación del eje embrionario. Alteración del tamaño de la cabeza con compromiso en la formación del cerebro y reducción de ojos y de la zona del sistema auditivo, que podrían indicar causas de malformaciones y deficiencias en la etapa adulta”, alerta la investigación, que también avanza sobre efectos neurológicos graves: “(Se comprobaron) Alteraciones en los mecanismos de formación de neuronas tempranas, por una disminución de neuronas primarias comprometiendo el correcto desarrollo del cerebro, compatibles con alteraciones con el cierre normal del tubo neural u otras deficiencias del sistema nervioso”.
Cuando los embriones fueron inyectados con dosis de glifosato muy diluido (hasta 300.000 veces inferiores a las utilizadas en las fumigaciones), los resultados fueron igualmente devastadores. “Malformaciones intestinales y malformaciones cardíacas. Alteraciones en la formación y/o especificación de la cresta neural. Alteraciones en la formación de los cartílagos y huesos de cráneo y cara, compatible con un incremento de la muerte celular programada.”
El glifosato afecta un conjunto de células que tienen como función la formación de los cartílagos y luego huesos de la cara.
La soja sembrada en el país ocupa 17 millones de hectáreas de diez provincias y es comercializada por la empresa Monsanto, que vende las semillas y el agrotóxico Roundup (a base de glifosato), que tiene la propiedad de permanecer extensos períodos en el ambiente y viajar largas distancias arrastrados por el viento y el agua. Se aplica en forma líquida sobre la planta, que absorbe el veneno y muere en pocos días. Lo único que crece en la tierra rociada es soja transgénica, modificada en laboratorio. La publicidad de la empresa clasifica al glifosato como inofensivo para al hombre.